En su carrera como director, Clint Eastwood viene marcando una tendencia en sus últimos trabajos: nos comienza a malacostumbrar a la excelencia. Sus películas gozan de aclamación popular y crítica, además de hacerse acreedores de múltiples premios y nominaciones. Sus ultimas obras acumulan 7 oscares y un total de 22 nominaciones de la academia en categorías como mejor película, mejor director, mejor actriz/actor, entre otras (Changeling, Letters from Iwo Jima, Flags of Our Fathers, Million Dollar Baby, Mystic River). Con el bagaje acumulado en los últimos años, honestamente me atreví a esperar bastante de esta película. Para mi alivio, Clint no fallo a mis expectativas. Eastwood, el cinematógrafo, vuelve con otro éxito: Gran Torino.
El primer gran punto a destacar en esta entrega, es el retorno de Eastwood a un papel protagónico. No había actuado desde su papel secundario en Million Dollar Baby. Pues bien, el hombre volvió con todo. Se manda, en mi humilde opinión, su mejor actuación desde Unforgiven (1992). El hombre vuelve con una intensidad inusitada, con humor y sensibilidad atípica de un tipo “rudo” como el. Sin duda, en Gran Torino, Eastwood nos entrega una de sus actuaciones más memorables.
En Gran Torino, Eastwood interpreta a Walt Kowalski, un veterano de la guerra de Corea recién enviudado. Kowalski es ultra conservador, racista, antisocial, grosero y no se lleva ni siquiera con sus propios hijos ( Que joyita!). Es sin duda el arquetipo de viejo gruñón a quien solo su mujer aguanta. Gozar de popularidad es algo que no le importa, ya que es evidente que no disfruta de la compañía de los demás. Kowalski es hombre de pocas palabras y muchos gruñidos. Se la pasa gruñendo toda la película… Es hilarante! Clint Eastwood captura la esencia de este personaje a la perfección.
Pues bien, en la película vemos como esta “joyita” se va enfrentando a un nuevo mundo ahora que ha enviudado. A pesar que inicialmente trata de alienarse en su pequeño mundo, las circunstancias llevan a Kowalski a enfrentarse, poco a poco, con nuevas personas, nuevos paradigmas e incluso, nueva comida. En este camino, aparecen Sue y Thao Lor, dos adolescentes de origen laosiano. Tras situaciones circunstanciales, Kowalski va estableciendo contacto con los jóvenes. Sue, una chica ávida e inteligente, y su tímido hermano Thao, van tejiendo una relación poco convencional con su vecino Walt Kowalski. Se establece poco a poco una relación de mutua enseñanza y crecimiento personal donde los jóvenes asiáticos van encontrando en su gruñón vecino, una figura paternal.
Si uno ve la portada promocional de esta película, cualquiera pensara que se trata de una película de acción y rudeza. Muy fácilmente se pudiera intuir que Eastwood regresa con una versión veterana de Dirt Harry. Pero no, nada cerca de la realidad. Gran Torino se presenta, más bien, como una agradable combinación entre comedia y drama. Tiene la capacidad de mostrar pasajes realmente jocosos y agradables pero a la vez se van estableciendo, poco a poco, los cimientos de un drama que va capturando al público. La historia es sencilla, pero aborda con inteligencia y buen tino diferentes temas sociales y va dejando como legado varias moralejas interesantes.
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