Reflexiones...

A veces uno olvida el valor de la vida, la amistad y la familia. Es decir, no se olvida completamente, pero de alguna manera se va tomando a la ligera. De momento me recupero de un asalto el cual, aparte de despojarme de posesiones materiales, bien me pudo haber arrebatado lo mas preciado que tenemos : la vida. Más allá de los pormenores del incidente, el cual pienso narrar más adelante, creo que hay situaciones que deben valorarse por lo que pudieron ser así como examinar lo que queda, después.

En mi caso lo que pudo ser , hubiera sido lo peor: la muerte. Y lo que quedó es lo mejor, mi vida, el cariño de la gente que me aprecia, el calor de los amigos y la estima de familiares y allegados. Soy agradecido de la vida y de todas las personas que de alguna manera forman parte de ella. Soy afortunado de poder volver a sonreír, conservar mi sentido del humor, bromear e incluso reírme un poco de mi.

Pero sobretodo siento infinita gratitud por tener tantos amigos, tanta gente que me rodea y me demuestra hasta en los gestos mas sencillos su cariño. Es increíble, pero si tuviera que hacer una lista de cada uno de las personas que han sido y siguen siendo importantes, no pudiera terminar hoy mismo. Pero ustedes saben quienes son. Con cada llamada, con cada visita, con cada atención, me hacen mas grande y se convierten en seres mucho mas importantes.

Hace poco veía la película The Blind Side y me decía a mi mismo lo increíble y maravilloso de darte cuenta gente buena hay en el mundo. Que por tanta maldad, también existe gente asombrosa, extraordinaria, buena. Y yo debo confesar que tengo gente extraordinariamente buena a mi lado. En los detalles mas pequeños uno valora la grandeza de la gente, el cariño, la amistad, la lealtad, y tu presencia en el corazón de los demás.

Por eso, aquí , recuperandome de mi mis heridas, les mando un abrazo a todos los que son parte de mi, parte de mi corazón, de mi cariño. Los que cada día están en mis pensamientos y que en cada detalle se hacen notar.

El tiempo pasará y de a poco me iré recuperando de estas heridas. Sin embargo jamás me sobrepondré al maravilloso sentimiento de sentirme querido. Ese sobrecogedor golpe de realidad que te hace sentir vivo, valorado, dispuesto siempre a seguir y darlo todo absolutamente en todo momento. Son regalos increíbles.

A veces uno olvida lo que tiene , lo que en verdad importa. Yo pretendo no olvidarlo nunca.Gracias a todos por ser parte fundamental de mi vida y por convertirme en quien soy y seguiré siendo para todos ustedes: Rafa.

Gracias de nuevo... Afortunadamente hay Rafa para rato.......


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